martes, 14 de febrero de 2017

Micotoxina v/s cáncer en Chile



Chile es uno de los países del mundo con más casos de cáncer de vesícula biliar, siendo la primera causa de muerte entre las mujeres, y buscando la causa probable, se habló de obesidad, una dieta rica en grasas, mas una genética que quizás aumente la susceptibilidad…pero los investigadores seguían buscando algo en común que no fuera el agua, porque tenemos una geografía que nos provee de aguas muy diferentes unas de otras a lo largo y ancho del país, hasta que hace un par de años, investigadores de la Universidad Católica junto al Instituto del Cáncer de EEUU publicaron en la revista JAMA un estudio donde encontraron un elemento nuevo en común que podría explicar la ocurrencia de un alto número de cáncer de vesícula en Chile: una sustancia tóxica producida por un hongo, la aflatoxina, que se conoce en otros países su relación con el cáncer de hígado y que científicos japoneses la encontraron en muestras de ají rojo chileno.

Entre 2012 y 2013 se analizó sangre de pacientes con cáncer de vesícula, de pacientes con cálculos biliares, y de personas sanas, y se vio que los pacientes que tenían más altos niveles de la toxina eran los con cáncer de vesícula, y además dijeron comer más ají que el grupo de control.

El problema es que este hongo puede crecer en granos, cereales y frutos secos, e incluso si un animal (vaca, cerdo) come alimento contaminado con esta toxina, ésta pasa a la sangre, carne, leche, y pasa al ser humano. Hay casos de aves de corral que han muerto por la toxina, y se ha encontrado aflatoxina en mantequilla de maní, ya que soporta todo el proceso de elaboración.

Por lo tanto, si una persona ingiere esta toxina rutinariamente, tendrá problemas de funcionamiento en su riñón, colon y testículos, y puede llegar a tener tumores o a necesitar diálisis.

Si no se consumen alimentos contaminados, tarda al menos un mes en ser eliminada de la sangre. Cuesta eliminarla, porque la toxina se une a una proteína llamada albúmina y la tenemos en la sangre en grandes cantidades.

Un producto contaminado debe ser destruido, pues esta toxina es resistente a la temperatura, a presiones mecánicas y a la cocción. Nada la destruye.

¿En qué productos la podemos encontrar? También en jugos de fruta, mermeladas, salsa de tomates, y en casi todos los productos en conserva que antes hayan sido fruta, o en los frutos secos.

¿Cómo actúa la toxina en el organismo? Produce la muerte general de las células a medida que avanza por la sangre.

El 31 de enero, el Ministerio de Salud emitió una alerta sanitaria al descubrir la presencia de toxina en el merkén de la marca “Marco Polo”, y ahora resultó que la marca “Gourmet” está con el mismo problema y el lote involucrado tiene vencimiento para el 26 de octubre de 2017, y ya fue comercializado, así que se recomienda a la población desechar el producto.

Fuente: Soychile.cl
              latercera.com
              biobiochile.cl
              lun.cl

miércoles, 8 de febrero de 2017

Otro invento chileno: Extracción de vesícula con imanes



Cuando me operé de vesícula, para sacar el “huevo de paloma” que tenía me hizo 4 orificios el cirujano…

Hoy, gracias a un invento del cirujano endoscopista chileno Alberto Rodríguez Navarro, basta sólo un orificio hecho en el ombligo. Por ahí se introduce un sistema de dispositivos con imanes, pinzas y electrobisturí que permite manipular órganos y tejidos como la vesícula, no se daña la pared abdominal, la cirugía demora apenas unos 30 minutos, y la recuperación es muy rápida.

Los estudios clínicos se hicieron entre enero de 2014 y marzo de 2015 en cincuenta pacientes de tres hospitales públicos de Santiago de Chile: Salvador, Luis Tisné y Padre Hurtado. Después se hicieron algunas cirugías en la Clínica Las Condes e Indisa y ahora se están haciendo cirugías en la Cleveland Clinic y con las Universidades de Duke y Stanford, para ser aprobada por la FDA, que ya aprobó el instrumento desarrollado por este médico chileno.

Fuente: lun.com

sábado, 4 de febrero de 2017

Reseteando células madre




Se llama Soledad Matus,  es bioquímica con doctorado en Ciencias Biológicas en la Universidad Católica , y trabaja en el Centro de Gerociencia, Salud Mental y Metabolismo de la Universidad de Chile en un proyecto en que, usando cierto tipo de células madre, reemplazará los tejidos dañados del cerebro y podrá diseñar terapias para combatir enfermedades neurodegenerativas como son el Parkinson y el Alzheimer.

Las células madre son células que tienen la capacidad de autorregenerarse y reparar tejidos; se multiplican y transforman, dando origen a distintos tipos de células.  El estudio consiste en obtener células madre pluripotenciales de piel o de tejido adiposo del mismo paciente a tratar, luego reprogramarlas usando ciertas moléculas llamadas factores de transcripción, que actúan sobre la información genética de las células; es decir, van al ADN y promueven que se transformen en neuronas dopaminérgicas, que son las que mueren con el Parkinson, y luego se implantan en la sustancia nigra del Sistema Nervioso Central, y ya hay estudios clínicos.

En el Alzheimer, aún no se ha hecho el reemplazo de neuronas, pero habría que hacerlo en el hipocampo o en la corteza cerebral, ya que ambas zonas se deterioran y se produce la muerte celular.

La doctora en Biología Molecular Xianmin Zeng, fue quien desarrolló los protocolos de cómo entregarles esa información genética que las hace transformarse en neuronas.
Lo maravilloso de esto, es que se usan células autólogas (que provienen del mismo paciente) y con ello disminuye el riesgo de rechazo o de reacción adversa, ya que poseen el mismo tipo de genes.


Fuente: lun.cl