sábado, 10 de diciembre de 2016

"CUERNOS MORTALES".



El famoso Parque Nacional Kruger, en Sudáfrica, alberga a la más grande población de rinocerontes, pero hay cazadores que los matan, con el único fin de conseguir sus cuernos para comercializarlos en otros países, a los que se les hace la guerra para que no sea el fin de los rinocerontes...

De los cientos de miles de estos animales que habían hace un par de siglos, quedan menos de 30 mil entre las 5 razas existentes, y unos pocos están en manos de privados que hacen los safaris fotográficos y cacería legal, pero la ignorancia humana hace que  quieran cuerno molido como tratamiento para cuanta enfermedad exista, desde una mordida de serpiente hasta usarlo como afrodisíaco, y se obtiene muchísimo dinero ya que se vende por kilo, siendo que cada rinoceronte macho puede tener 10 kg de cuerno.
En nuestro planeta  hay varias especies de animales que están siendo aniquilados, como los elefantes por su marfil, las jirafas por sus colas, los tiburones por sus aletas, etc.
El cuerno de los rinocerontes es de queratina, proteína como la de nuestras uñas y pelo, y si se le corta, vuelve a crecer, de manera que los criadores de rinocerontes de Sudáfrica se lo cortan cada 20 meses y de buena manera; es decir, utilizando dardos tranquilizantes. Luego los guardan, a la espera de una ley que los autorice a venderlos legalmente, lo que tampoco serviría para parar la caza ilegal de estos animales, con el fin de quitarles el cuerno...un negocio que representa mucho dinero, como el de las drogas.
Hubo un tiempo en que la venta de cuernos era legal si se hacía dentro de Sudáfrica, pero desde febrero de 2009, se prohibió.
El negocio mueve tanto dinero, que la corrupción llegó al Sistema de Justicia y a la policía, que trabajan con los cazadores ilegales.
Y algo más: el salvajismo con que se trata a estos animales, porque a veces le cortan el cuerno con motosierra, y lo más largo que se pueda, por lo que el corte se hace cerca del punto de crecimiento, que causa sangrado  y es doloroso; es como si nos cortáramos las uñas cerca del punto de crecimiento, con un dolor insoportable.
En cuanto a cómo financiar los proyectos especiales de conservación, el Parque Nacional Kruger vende algunos rinocerontes a agencias de safaris para que los cacen.

Fuente:National Geographic.
Foto: de google.